Hugo Carrillo

Con la frase “El tiempo lo cura todo” comienza una nueva fase en la obra. La integración de esta nueva idea en el desarrollo del trabajo implica la mezcla de una parte erótica que siempre ha estado presente como base en los pensamientos que se desglosan al producirla, sentimientos de placer, dolor y control mencionados en la teoría del panóptico de Michel Foucault, rasgos autobiográficos basados en el desarrollo de la sexualidad como un individuo ajeno así mismo de Sigmund Freud, la “Peste Rosa” o el SIDA visto como un castigo divino que viene directamente de la mano de Dios para exponer al hombre impuro al escarmiento público y la imagen base de los purgatorios como un campo ficticio para el desarrollo de esta idea metafórica donde lo bueno y lo malo están entrelazados íntimamente el uno con el otro delimitados sutilmente por la consciencia colectiva mas que por el deseo mismo del individuo.

La noción del tiempo se nos escapa de las manos y no nos damos cuenta. Dicen que “el tiempo y el olvido son como hermanos gemelos, que se va echando de más a quien un día se echo de menos”.Un día más y un día menos. La reciente serie “Los hilos lo cubren todo” implica al tiempo como factor determinante en su desarrollo. Basado en los principios anteriores la acción de trabajar en algo por meses da espacio para esta relflexión sobre lo que el hace y deshace y lo que se logra hacer. El no lo decide todo, las decisiones las tomamos nosotros, el sólo nos da espacio para pensar y luego decidir. Las piezas de tela utilizadas hacen parte de personas conocidas lo cual conlleva a un significado simbólico muy personal al ser utilizadas en una colcha imaginaria de recuerdos que los hilos unen, mezclan y cubren hasta crear una nueva forma de percibilos. El tiempo no cura las heridas, solo las logra esconder, adaptar y el es único que no perdona los pecados en ellas, por esta razón los purgatorios siguen presentes en los formatos aleatoriamente cocidos al lienzo. El tiempo por momentos es irracional e inexistente, en vez de tiempo existe el movimiento, sin movimiento no hay tiempo, todo movimiento termina al igual que nuestro tiempo. Aquel que no recuerde el pasado está condenado a repetirlo.